®La amistad, esa relaci¢n sin dependencia, sin episodio, y donde, noobstante, cabe toda la sencillez de la vida, pasa por elreconocimiento de la extra¤eza com£n que no nos permite hablar denuestros amigos, sino s¢lo hablarles, no hacer de ellos un tema deconversaci¢n (o de art¡culos), sino el movimiento del convenio deque, habl ndonos, reservan, incluso en la mayor familiaridad, ladistancia infinita, esa separaci¢n fundamental a partir de la cual loque separa se convierte en relaci¢n.¯ La desaparici¢n de GeorgesBataille se convierte para Maurice Blanchot en ocasi¢n de pensar laamistad ligada a la inminencia de la muerte; de soportar laproximidad del amigo en el reconocimiento de una extra¤ezaparad¢jicamente com£n. A partir de la ausencia de centro que es paraBlanchot la escritura, los ensayos que componen La amistad buscanhacerse cargo del movimiento infinito de la literatura y del®insensato juego de escribir¯. Sus temas van de la tarea deltraductor al nacimiento del arte; del comunismo a la transgresi¢n;del juda¡smo al problema del lenguaje. Y hacen este recorrido leyendoa los escritores en sus obras y en su compa¤¡a: con Kafka y Char,Camus y Duras, Leiris y Paulhan, Bataille y Klossowski. En ®laamistad libre, desapegada de todo lazo¯.