Los niños crecen muy deprisa. ¿Cuánto tiempo seguirá queriéndose poner lo que tejes? ¿Cuántos veranos más te dará la mano al cruzar la calle y te acariciará el dedo meñique cuando le entre sueño? Un díadescubres que ya no eres todo su mundo, ni falta que hace, y que teconformas con ser parte de él. Entonces te preguntas cuánto te querrá, qué te reprochará, mientras ves cómo te quiere, cómo te odia, cómo se afirma, cómo se avergüenza... Un libro íntimo y emocionante sobre las sensaciones que produce en una madre ver crecer a los hijos.