Amar como am¢ Jes£s, es decir, revelar a Dios mediante el amor a losdem s: vivida al pie de la letra, esta exigencia basta paratransformar una vida. Y para convencerse no hay m s que leer estostextos, que iluminan con una luz nueva una verdad tan simple yelemental. La alegr¡a de creer re£ne sobre todo meditacinoes sobre loscaminos del amor a trav‚s de la soledad, el sufrimiento, la sencillez, la oraci¢n y la fidelidad al Evangelio y a la Iglesia. Laoriginalidad de Madeleine Delbrel consiste en haber repetido, condulce insistencia, que los hijos de Dios est n, hoy como siempre,llamados a salvar al mundo, por su cuenta y riesgo, con y por lafuerza del Hijo £nico: "La esperanza de los ap¢stoles de todos lostiempos es una gigantesca pordiosera con los pies en un mundo perdido, que lleva en los brazos a los hombres m s olvidados y esinfinitamente pobre con ellos..., pero sonr¡e a una Redenci¢n queespera del cielo como nosotros esperamos el d¡a". Escritas entre 1935 y 1964, estas p ginas reflejan una vida quesupo conjugar fidelidad y creatividad, realismo sobre la vida y sobrela historia y adhesi¢n a las constantes evang‚licas.MADELEINE DELBRÊL (1904-1964), que en el momento de su muerte erapr cticamente una desconocida, se ha convertido con el tiempo en punto de referencia obligado para una verdadera espiritualidad laicalenraizada en el Evangelio, atenta a los "signos de los tiempos",celosa de la felicidad del pr¢jimo y en di logo abierto y creativo con la re