¿Habéis tenido alguna vez la sensación de que todo te va a ir bienporque estás en armonía con el universo? Pues yo no. Nunca.
Quizás no ayude mucho que sea una treintañera neurótica, contendencia a hablar más de la cuenta y a meterme donde no me llaman.Ni que me relacione sobre todo (por no decir únicamente) con ungay con la mala costumbre de tener siempre razón, una madrecleptómana, una gata y un vecino empeñado en ser mi novio.
Ni que mi gran objetivo en la vida sea llegar a ser la directora de la revista de la que están a punto de despedirme.No, nada de eso ayuda, pero lo que de verdad ha empeorado las cosaha sido Él... Serkan? Ese maldito vagabundo de ojos azules y acentoseductor que le va a dar la vuelta a mi vida.Pero si os pensáis que voy a enamorarme. Estáis muy equivocadas, lo que voy a hacer, es mandarle a la mierda y? y? y? Ya, vale, sí,efectivamente. Soy ciclotímica perdida.Así que os podéis reír de mí... No pasa nada. Estáis invitad@s.J