De Antinoo sabemos su nombre, su procedencia ?la antigua Bitinia, enla costa del Mar Negro? y que era el esclavo favorito del emperadorAdriano. Tambi‚n que se suicid¢ de forma ritual para procurar el biende su amo, y que m s tarde ‚ste erigi¢ una ciudad en su nombre?Antin¢polis? y lo convirti¢ en dios. Nada tiene que ver este"Antinoo" con los poemas que han configurado las personalidades deCaeiro, Reis, Alvaro de Campos o el ort¢nimo Pessoa. Aqu¡ Pessoamuestra otro quehacer, otro poeta. Un poeta ret¢rico, arcaizante, m scercano a Wilde en su preciosismo y artificiosidad estil¡sticas que acualquiera de los heter¢nimos portugueses, en el que aparecen lasinfluencias cultas de su juventud, las lecturas de los poetas cl sicos ingleses, muy especialmente los rom nticos. Con esta reedici¢nponemos en manos de los lectores un Pessoa hasta ahora inencontrable.