MARTINEZ MARTINEZ, MOISES / GARCIA MARIN,
Al Qahira como la llaman los árabes, es la cuna del arte islámico yuna inmensa metrópoli de unos veinte millones de habitantes. La ciudad es un impresionante hervidero de gentes donde todo, más tarde quetemprano, termina funcionando. En su extensa superficie se concentraun amplio resumen de lo que es y ha sido Egipto y el mundo: lasincomparables pirámides de Giza junto a la mítica Esfinge, Saqqara yla pirámide del faraón Zoser. A lo que se añade el Museo Egipcio deAntigüedades, o el colorido y bullicioso barrio islámico cairota,donde se alzan algunas de las mezquitas más importantes del mundo. Elbarrio de Jan el Jalili está actualmente muy cuidado y es un paraísopara disfrutar de las compras y de la arquitectura islámica. Sucontrapeso es el barrio copto, de evocaciones bíblicas, el de losantiguos cristianos, y por donde pasó la Sagrada Familia. Por último,el Nilo cruza y multiplica una ciudad siempre llena de sorpresasespecialmente si se vaga sin rumbo fijo por los barrios más populares, allí donde precisamente la vida fluye casi como el río cuyas fuentescostó tanto encontrar