Cuenta Jorge Bucay que detr s del enojo de muchas personas a menudo se encuentra una tristeza profunda. Una aflicci¢n disfrazada de rabia eincapaz de aflorar, que nos confunde y nos hace sentir furiosos. Perosi nos tomamos el tiempo suficiente, podremos darnos cuenta de que las emociones no son siempre como parecen y que quiz s, cuando creemosestar enfadados, lo que ocultamos es precisamente la pena. En estaf bula, llena de realidad y ternura, Jorge Bucay nos explica lahistoria de la abuela de Luc¡a, una mujer con un car cter agrio y elcoraz¢n endurecido que, desde hace a¤os, transforma el dolor por unap‚rdida en una irritaci¢n permanente. Jorge Bucay nos ofrece, una vezm s, una lecci¢n vital imprescindible y nos propone una pauta clara.Descubrir nuestros verdaderos sentimientos es la clave para ser m sfelices.