Publicado a sus expensas en 1959, con una breve pero esclarecedorasemblanza previa de su amigo Paul Morand, Lejos y en la mano deJoaqu¡n Romero Murube forma parte de la pentalog¡a que completanSevilla en los labios (1938), Discurso de la mentira (1943),Memoriales y divagaciones (1951) y Los cielos que perdimos (1964),siendo de estos libros el £nico que no hab¡a tenido hasta la fecha una reedici¢n exenta. Los art¡culos que lo integran, originalmenteaparecidos en la prensa, fueron reelaborados por el ensayista convistas a su incorporaci¢n a un volumen donde se alternan, como enotros suyos, las presencias literarias, los viajes por Andaluc¡a y por algunos pa¡ses europeos, y los textos sobre Sevilla. Acogidos a suingenioso y parad¢jico t¡tulo, donde la lejan¡a puede ser tantoespacial como temporal y la inmediatez sugiere cercan¡a al lector, son textos muy cuidados que dejan constancia de la incansable condici¢nde flƒneur de Romero Murube, de su arte como retratista y su capacidad para el dibujo de caracteres, de la gracia para la evocaci¢n llena de reminiscencias y del profundo amor a la ciudad ?fruto no delensimismamiento, sino del contraste y la experiencia de otrasgeograf¡as? que impregnan toda su obra. Entre la memoria, ladivagaci¢n y el ensayismo, la prosa de Joaqu¡n Romero Murube, comoafirman en su presentaci¢n Jacobo Cortines y Juan Lamillar, tal vezlos estudiosos que m s han hecho por el rescate del autor sevillano ymejor han interpretado su obra, se muestra deudora de la mejorherencia de Juan Ram¢n, Mir¢, Azor¡n y Ortega, sin olvidar el influjodirecto de su maestro Jos‚ Mar¡a Izquierdo. Lejos y en la mano es unlibro por el que, como sentenciara Morand, ®la belleza corre araudales¯.