En el primer volumen, dejamos al protagonista deseoso de saber quése oculta detrás del cuadro titulado La muerte del comendador.También ha aprendido a convivir con los extraños personajes y objetosque lo envuelven desde que se instaló en la casa en las montañas. Y, a petición de su vecino, ha empezado a esbozar el retrato de unapeculiar adolescente, Marie Akikawa. Pero cuando ésta, una tarde enque regresaba del colegio, desaparece misteriosamente, el protagonista se lanzará en su busca. Y para encontrarla no dudará en enfrentarse a lo desconocido, y tampoco a los terribles dilemas a los que suaventura va a conducirle. ¿Qué le ocurrió en el pasado al autor delcuadro La muerte delcomendador? ¿Quién es el hombre sinrostro?... En este segundo libro, de ritmo acelerado y lleno desuspense, las incógnitas sembradas en el anterior volumen vandesvelándose, y encajan en el lugar que deben ocupar, como en unpuzzle, para que el lienzo entero cobre pleno sentido.