El arte imita a la vida, dijo Arist¢teles. La vida imita al arte,replic¢ Wilde. La vida imita a la televisi¢n barata, sentenci¢ WoodyAllen. Oscar Colifatto viste de riguroso negro y detesta la luz delsol, las calles fr¡volas y chillonas de Miami, los animales y losni¤os..., lo detesta todo menos a s¡ mismo. Mani tico e hipocondr¡acohasta el extremo, trata de mantenerse aislado del mundo para que nadani nadie trastoque su mon¢tona rutina como guionista de culebrones. Ha de escribir una nueva telenovela que restituya su fama perdida, perosu creatividad se ve mermada a ra¡z del abandono #debido a un peque¤oincidente# de Natalia, la mujer con quien convive desde hace seisa¤os. Una vecina explosiva e iluminada de los libros de autoayuda, eladorable perrito de ‚sta, un exigente productor de telenovelas, unaprostituta enviada por este £ltimo para calmar el desamor y un hijoque tuvo trece a¤os atr s se entrometen en su proceso creativo. Y enel centro de la trama, Oscar, uno de esos personajes mani ticos,pat‚ticos y freaks pero al mismo tiempo entra¤ables que quedan en lamemoria para siempre.