En 1668 la Monarqu¡a Hisp nica reconoci¢ formalmente la independenciadel reino de Portugal. Ser¡a inocente considerar que esa fecha pusofin a los recelos a ambos lados de la frontera: al contrario, sabemosque la idea de reintegraci¢n de los antiguos vasallos estuvo muypresente en la Corte de Madrid a finales del siglo XVII y que a£ncole¢ con la Guerra de Sucesi¢n como tel¢n de fondo. Este libropretende, sin embargo, rastrear la pervivencia en la Pen¡nsula Ib‚rica de una empresa unificadora no unidireccional y que supera, por tanto, el marco de un «Portugal de los Austrias». Para ello, presenta unabordaje diferente al practicado tradicionalmente y muestra unPortugal activo y generador de modelos pol¡ticos para todo el mbitohispano que poco tiene que ver con el rol pasivo que con frecuencia le ha sido atribuido en sus relaciones con Espa¤a.