Cada uno de los tres ensayos Pasiones, Salvo el nombre y Khoraconstituye una obra independiente y puede leerse como tal. Si, noobstante, se juzg¢ oportuno publicarlos simult neamente, fue porque,pese al origen singular de cada uno de ellos, los recorre el hilo deuna misma tem tica: forman una suerte de Ensayo sobre el nombre.
En Salvo el nombre se trata nada menos que de la salvaci¢n. Dosinterlocutores conversan acerca de lo que gira alrededor del nombre,singularmente del nombre de «nombre», del nombre de Dios, y de lo queeste deviene en lo que se llama «teolog¡a negativa», donde elSobreNombre nombra lo innombrable, es decir, a la vez, lo que no sepuede ni se debe nombrar, definir o conocer, ante todo porque lo queentonces se sobrenombra se sustrae, sin mantenerse en ello, m s all del ser. ¿Qu‚ es un SobreNombre, lo que vale m s que el nombre, perotambi‚n lo que ocupa el lugar del nombre? ¿Y se da alguna vez para lasalvaci¢n del nombre por fin Salvo?